YO QUIERO QUE OBSERVES TU MUNDO

YO QUIERO QUE OBSERVES TU MUNDO

1. Las aguas estancadas se pudren y son desechadas, hoy rompe la inercia, rompe la estaticidad, rompe los apegos erróneos, desoxida tu corazón. 2. Hoy actúa sobre todo aquello que signifique estancamiento de la creatividad y dale fin a la paralización…las aguas estancadas se pudren y son desechadas…agua cristalina y limpia está bien…agua.

3. ¿Eres consciente de la cantidad de seres vinculados efectivamente a tu universo?

4. ¡¡¡Rompe el apego!!! En todos los órdenes e incluye a más seres a tu universo, mira, piensa, nombra, valora sus hechos, piensa en ellos sin pensamientos discordantes o limitación, desoxida tu corazón.

5. Quiero que observes tu mundo y lo describas en simples palabras, y determines todas las variaciones de relaciones y las causas que las motivaron, esto en privado, a puertas cerradas, apaga el celular, déjalo guardado y lejos, apaga todo equipo de alta gama, desenchufa, aleja de ti a todo espía.

6. Desoxida tu corazón. Cuando la Vida posibilite que nos encontremos cara a caja, te voy a preguntar, si es que me lo permites: ¿cuántos seres ingresaron en tu universo, que capacidad de servicio tienes para con ellos? Hoy hacer algún servicio simplemente por amor. 7. Es mi felicidad en encuentro con los estudiantes de Armonía y Libertad: mirar, tocar y comprender la problemática de cada uno, esto, los estudiantes avanzados, que siguen la enseñanza Armonía y Libertad. Ya sabes que el límite implica en esencia una división. Examina atentamente esto que yo te digo.

8. Recuerda que siempre aparecen límites, los límites implican la separación entre dos, tres o más cosas y seres. Los límites pueden implicar los finales, los contornos de algo o alguien. 9. Atención, hay tiempo límite en cada hecho, acto. Hay hechos límites, hay hora límite y hay situaciones límites en una persona. El límite implica en esencia una división.
PD: Este texto fue ampliado para mayor claridad y actualidad en el 2014, el autor. 

                                                   Víctor Hugo Márquez

                                                  Tucumán, mayo de 1987